Ir al contenido
Portada » EE.UU. exige que Europa asuma la defensa convencional de la OTAN antes de 2027

EE.UU. exige que Europa asuma la defensa convencional de la OTAN antes de 2027

Washington ha puesto una fecha límite a la Alianza Atlántica: Europa debe asumir la responsabilidad de la defensa convencional de la OTAN para el año 2027, con especial énfasis en que Alemania lidere el proceso. La medida busca equilibrar la carga militar y reforzar la seguridad colectiva frente a nuevos desafíos estratégicos.

Contexto de la exigencia estadounidense

El gobierno de los Estados Unidos ha reiterado en los últimos meses la necesidad de que los aliados europeos aumenten su participación en la defensa convencional de la OTAN, es decir, la capacidad de desplegar tropas terrestres, blindados, artillería y sistemas de defensa aérea que no involucren armas nucleares. La petición se inscribe dentro de un debate histórico sobre la carga financiera y operativa que cada miembro debe aportar al bloque.

La fecha límite: 2027

Según múltiples fuentes, Washington ha establecido el año 2027 como plazo máximo para que Europa asuma plenamente este rol. La decisión se tomó después de la evaluación de los planes de defensa de los países miembros y de la creciente presión de Washington para que la alianza no dependa desproporcionadamente de los recursos estadounidenses.

El papel de Alemania

En un comunicado reciente, la Casa Blanca instó a Alemania a prepararse para liderar la transición, dada su posición económica y militar dentro de la UE. Se espera que Berlín diseñe una hoja de ruta que incluya inversiones en modernización de equipamiento, entrenamiento conjunto y mayor presencia de tropas en el Este de Europa.

Implicancias para la seguridad europea

Esta medida podría traducirse en un aumento del gasto de defensa de los países europeos, cuyo objetivo oficial es alcanzar el 2 % del PIB, requisito pactado en la Cumbre de Lisboa de 2014. Además, la mayor capacidad convencional fortalecerá la disuasión frente a posibles agresiones de potencias externas y reforzará la interoperabilidad de las fuerzas aliadas.

Reacciones y desafíos

Los gobiernos de Francia, Italia y Polonia han manifestado su disposición a colaborar, aunque advierten sobre la necesidad de recursos financieros y tiempo para cumplir con los estándares requeridos. Los críticos señalan que la carga recae sobre economías ya tensionadas por la crisis energética y la inflación.

Próximos pasos

Se espera una serie de reuniones de alto nivel en la próxima Cumbre de la OTAN, prevista para el primer semestre de 2026, donde se definirán los compromisos concretos y se supervisará el avance de los planes europeos.