En los últimos días la ciudad costera de La Serena, Chile, ha sido escenario de tres fatalidades por inmersión en sus playas. Tras la muerte de un joven sanjuanino, se reportó el ahogamiento de un menor y el fallecimiento de un adolescente de 16 años que había sido rescatado días antes en la zona de El Faro. Las autoridades locales intensifican las medidas de seguridad y alertan a la población.
Antecedentes
La Serena, conocida por sus extensas playas y su clima templado, atrae a miles de veraneantes cada verano. Sin embargo, la práctica de la natación en playas sin vigilancia puede resultar peligrosa, sobre todo cuando el oleaje es fuerte y no existen salvavidas permanentes.
Los hechos recientes
En una primera tragedia, un joven originario de la provincia de San Juan, Argentina, falleció tras ser arrastrado por la corriente de la playa de La Serena. Apenas días después, otro caso cobró la vida de un menor que se ahogó mientras jugaba en la zona costera.
Un tercer incidente involucró a un adolescente de 16 años que había sido rescatado en estado crítico en la playa del Faro, conocida localmente como El Faro, y que tras pasar cinco días en unidades de cuidados intensivos, falleció.
Perfil de las víctimas
Los tres fallecidos eran jóvenes, dos de ellos residentes de la zona costera y uno proveniente de Argentina. La edad del menor no se ha precisado, mientras que el adolescente tenía 16 años y había sido atendido en el hospital regional de La Serena.
Respuesta de las autoridades
El municipio de La Serena emitió un comunicado alertando sobre los riesgos de inmersión y anunció la instalación de bolsas de seguridad y la contratación de socorristas adicionales durante la temporada estival. Asimismo, la Policía de Investigaciones (PDI) abrió una investigación para determinar posibles negligencias en la señalización de zona de baño.
Recomendaciones y contexto
Los expertos en seguridad acuática recomiendan vigilar siempre a los menores, respetar las banderas de señalización y evitar nadar fuera de áreas vigiladas. La costa de La Serena se caracteriza por corrientes de resaca que pueden arrastrar a los bañistas rápidamente.
Esta serie de tragedias subraya la necesidad de reforzar la cultura de prevención de ahogamientos en toda la región, especialmente antes del inicio del periodo de vacaciones de verano.