Detectar a tiempo el cáncer de testículo salva vidas. Los expertos revelan los siete síntomas clave que todo hombre debe conocer, desde un bulto indoloro hasta cambios sutiles en el escroto, y explican la importancia de la autoexploración regular y la evaluación médica inmediata.
¿Qué es el cáncer testicular?
El cáncer testicular es una neoplasia que se origina en las células de los testículos, órganos responsables de la producción de esperma y hormonas sexuales. Aunque representa menos del 1% de los cánceres en hombres, es el más frecuente entre jóvenes de 15 a 35 años. Su pronóstico es altamente favorable cuando se detecta en etapas tempranas.
Los 7 síntomas que alertan a los especialistas
Los profesionales de la salud coinciden en que la vigilancia de los siguientes signos permite una detección precoz:
- Bulto o hinchazón indolora en el testículo: el síntoma más frecuente; puede sentirse como una masa firme.
- Sensación de peso o presión en el escroto: una sensación de pesadez que no desaparece.
- Dolor o molestia persistente en uno de los testículos o en el escroto, que puede ser intermitente o continuo.
- Aumento del tamaño o cambio en la forma del testículo, incluyendo una asimetría evidente.
- Dolor sordo en el abdomen inferior o en la ingle, que a veces se irradia hacia la zona lumbar.
- Acumulación súbita de líquido (hidrocele) alrededor del testículo, que produce hinchazón visible.
- Desarrollo inesperado de tejido mamario (ginecomastia), aunque menos frecuente, puede acompañar algunos tipos de cáncer testicular.
Por qué la autoexploración es esencial
Los expertos recomiendan que los hombres, especialmente entre los 15 y 35 años, realicen una inspección mensual del escroto. La técnica consiste en palpar suavemente cada testículo mientras se está de pie y, después de la ducha, para detectar cualquier irregularidad.
Cuándo acudir al médico
Ante la aparición de cualquiera de los síntomas descritos, es fundamental consultar a un urólogo o a un médico de cabecera sin demorar. La evaluación suele incluir ecografía testicular y, de ser necesario, análisis de marcadores tumorales en sangre.
Pronóstico y tratamiento
El cáncer testicular responde excelentemente a la terapia quirúrgica (orquiectomía) y, cuando corresponde, a la quimioterapia o radioterapia. Las tasas de curación superan el 95% en casos diagnosticados precozmente.
Conclusión
Conocer estos siete indicadores y practicar la autoexploración permite intervenir a tiempo, reduciendo riesgos y aumentando las posibilidades de cure total. La información y la prevención son nuestras mejores armas contra el cáncer testicular.
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