En octubre de 2025 la morosidad de tarjetas de crédito y préstamos personales de los hogares argentinos llegó a 7,7% y 9,9% respectivamente, los índices más altos desde 2010, según el Banco Central, mientras los salarios siguen estancados y los costos del crédito se disparan.
Contexto general
El informe de Bancos que publica el Banco Central de la República Argentina (BCRA) muestra que la morosidad de los créditos concedidos a hogares ha alcanzado su pico histórico desde que el organismo comenzó a registrar estos datos en enero de 2010. En octubre de 2025 la tasa de mora general subió de 7,3% a 7,8%, marcando el nivel más alto en 15 años.
Tarjetas de crédito y préstamos personales
Los dos segmentos que más arrastran el aumento son:
- Tarjetas de crédito: la mora alcanzó 7,7%, frente al 1,7% registrado antes de la asunción del gobierno de La Libertad Avanza. Este salto representa un aumento de 6 puntos porcentuales.
- Préstamos personales: la tasa de incumplimiento llegó a 9,9%, subiendo desde el 9,1% del mes anterior.
En contraste, los créditos hipotecarios se mantuvieron relativamente estables, con una morosidad que ronda el 0,9% al 1%.
Factores detrás del deterioro
Varias variables explican este comportamiento:
- Salarios estáticos: la remuneración real de los trabajadores no ha crecido al ritmo de la inflación, limitando la capacidad de pago.
- Altas tasas de interés: los costos del crédito alcanzaron niveles cercanos al 200% anual en algunos productos, como los adelantos por descubiertos y las financiaciones con tarjetas.
- Mayor uso de crédito: bajo la actual gestión se observó un aumento en la demanda de tarjetas y préstamos personales como mecanismo de liquidez cotidiana.
Comparación regional
Con un 7,8% de morosidad, Argentina supera a sus vecinos: Colombia (5,2%), Brasil (4,5%), México (2,7%), Chile (2,5%) y Paraguay (2,4%). En octubre de 2023 la morosidad familiar argentina era de 2,7%, ubicándose apenas por encima de Chile.
Reacciones de autoridades y análisis
El BCRA indicó que está monitoreando la evolución de las variables crediticias, aunque no considera que la situación comprometa la salud del sistema financiero, que sigue bien capitalizado. Analistas advierten que la tendencia podría reflejar un desajuste estructural entre la oferta de financiamiento y la capacidad de repago de los hogares.
Perspectivas
Se espera que la morosidad encuentre un techo en los próximos meses, siempre que la presión de las tasas se modere y la economía recupere capacidad de consumo. Sin embargo, la combinación de salarios estancados y crédito costoso sigue generando un círculo vicioso que limita la recuperación del consumo interno.
Mirá esta noticia en YouTube y dejános tus comentarios:
https://www.youtube.com/watch?v=YY-OYE4Qg-M