El líder de La Libertad Avanza, Javier Milei, ha generado controversia al negarse a saludar a Victoria Villarruel y Jorge Macri durante el Tedeum. La decisión, justificada por Milei con la frase “Roma no paga traidores”, ha desatado un debate político y ha recibido tanto apoyo como rechazo. Analizamos las posibles motivaciones detrás de este gesto y sus implicaciones en el panorama político actual.
El controvertido desplante de Milei
El pasado 25 de mayo de 2025, durante el tradicional Tedeum en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires, Javier Milei protagonizó un hecho que ha acaparado la atención mediática. El líder de La Libertad Avanza se negó a saludar a Victoria Villarruel y Jorge Macri, generando un clima de tensión y abriendo un nuevo capítulo en la ya compleja escena política argentina.
Milei justificó su accionar con la frase “Roma no paga traidores”, una declaración que ha sido interpretada de diversas maneras. Mientras algunos la consideran una muestra de firmeza ideológica, otros la ven como un gesto de falta de respeto y una muestra de la polarización política que caracteriza al país.
Las reacciones ante el gesto de Milei
La decisión de Milei ha generado reacciones encontradas. Si bien algunos sectores, principalmente dentro del espacio político de derecha, respaldan la postura del economista, otros la critican duramente. Alberto Werthein, por ejemplo, se pronunció a favor del gesto de Milei, mientras que otras figuras políticas y personalidades de la opinión pública han expresado su rechazo a la actitud del líder libertario.
La Iglesia Católica, a través del arzobispo de Buenos Aires, ha llamado a la construcción de una “Patria de hermanos”, en un llamado a la unidad y al diálogo que contrasta con la creciente polarización política que se manifiesta en este tipo de eventos.
Diversos medios de comunicación han analizado el incidente, destacando la falta de saludo como una muestra de la creciente fragmentación política argentina. Algunos analistas interpretan el gesto como una estrategia política de Milei para consolidar su base electoral, mientras que otros lo consideran un error que podría perjudicarlo en el largo plazo.
El contexto político argentino
El evento se produce en un contexto de alta polarización política en Argentina. El peronismo y el kirchnerismo, tradicionalmente fuertes en la escena política argentina, se encuentran en un proceso de reorganización y redefinición de su estrategia electoral. La irrupción de Milei, con su discurso anti-establishment y su propuesta económica liberal, ha generado una nueva dinámica en el tablero político. El incidente con Villarruel y Macri se suma a una serie de eventos que reflejan la complejidad y la tensión de la escena política argentina en la actualidad.
Victoria Villarruel, referente de la agrupación política derechista, y Jorge Macri, político del PRO, representan sectores con los que Milei mantiene una relación compleja, marcada por diferencias ideológicas y estrategias políticas disímiles. Su negativa a saludarlos podría interpretarse como una estrategia para demarcarse de estas figuras y reafirmar su posición política independiente.
Conclusión
El rechazo de Milei a saludar a Villarruel y Macri ha generado un debate político con implicaciones significativas en el panorama electoral argentino. Si bien aún es temprano para evaluar las consecuencias a largo plazo de este gesto, es innegable su impacto en el clima político actual, reflejando la creciente polarización y la complejidad de la escena política argentina.
