El 11 de noviembre de 1918 la rendición alemana en el vagón de Compiègne puso fin a la Primera Guerra Mundial
El 11 de noviembre de 1918, a las cinco y cuarenta y cinco de la madrugada, los delegados alemanes firmaron el armisticio en un sencillo vagón de tren en Compiègne, sellando la cesación de hostilidades que puso fin a cuatro años de guerra. El documento entró en vigor a las once de la mañana, marcando el inicio de la paz que hoy se conmemora en todo el mundo.