Independiente Rivadavia logró su primer título de Copa Argentina al derrotar a Argentinos Juniors en una electrizante tanda de penales, con Sebastián Villa como héroe al anotar el disparo definitivo que le dio la victoria y abrió la puerta a la Libertadores 2026.
Una final de infarto
El encuentro decisivo de la Copa Argentina se definió en la ampliación, cuando Independiente Rivadavia y Argentinos Juniors empataron 2-2 en el tiempo reglamentario y los tiempos extra. La definición se resolvió mediante una tanda de penales que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos.
El momento clave: Sebastián Villa
El arquero de Rivadavia, Sebastián Villa, se convirtió en el protagonista absoluto. Después de detener dos tiros rivales, Villa tomó el último penal de su equipo y, con frialdad, anotó el gol que selló el campeonato. Su celebración, rodeado por sus compañeros, quedó inmortalizada como la imagen más simbólica del triunfo.
Impacto en la clasificación a la Libertadores 2026
Con el trofeo en su haber, Independiente Rivadavia asegura una plaza directa en la Copa Libertadores 2026, modificando el panorama de clasificación de los equipos argentinos. El título también permite al club participar en la Copa Sudamericana 2025, generando importantes ingresos y visibilidad internacional.
Reacciones y análisis
Los analistas deportivos destacan la solidez defensiva y la mentalidad de los penales de Rivadavia. Según Infobae, la victoria reconfigura la lucha por los cupos internacionales, desplazando a equipos como River Plate que esperaban un desfase en la tabla de clasificación.
Por su parte, la prensa local resaltó la figura inesperada de Gonzalo Marinelli, quien participó en la tanda y aportó un momento clave antes del disparo de Villa. La combinación de experiencia y juventud fue determinante para el éxito del conjunto.