El economista Miguel Kiguel insiste en que la prioridad de Argentina debe ser acumular reservas internacionales. Según sus declaraciones, los países con mayor solidez financiera no recurren a Estados Unidos ni al Fondo Monetario Internacional, y el Gobierno debe enfocarse en fortalecer su posición cambiaria antes de 2026.
Acumulación de reservas, la clave para la estabilidad
En una serie de entrevistas publicadas recientemente, el reconocido economista Miguel Kiguel subrayó la importancia de que Argentina aumente sus reservas internacionales. Para Kiguel, contar con un colchón de dólares y otras divisas permite al país enfrentar crisis externas sin depender de préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI) o de líneas de crédito de Estados Unidos.
¿Qué son las reservas internacionales?
Las reservas internacionales son activos en moneda extranjera (principalmente dólares) que los bancos centrales mantienen para estabilizar el tipo de cambio, asegurar el pago de la deuda externa y generar confianza en los mercados financieros. Un nivel elevado de reservas brinda mayor autonomía para la política macroeconómica.
La “trampa” cambiaria y la agenda para 2026
Kiguel advierte sobre una “trampa” que se genera cuando el gobierno recurre a medidas temporales –como la emisión de bonos o la venta de dólares en el mercado negro– para cubrir déficits sin construir reservas. En este contexto, la prioridad para 2026 debería ser:
- Incrementar la acumulación de reservas netas.
- Reducir la exposición a la deuda externa.
- Implementar una política cambiaria que limite la volatilidad del dólar.
Crítica a la gestión actual
Según el propio Kiguel, el gobierno ha estado “administrando sobresaltos” en lugar de “juntar reservas”. Señala que la falta de reservas impide al Estado pagar de manera segura sus compromisos y aumenta la vulnerabilidad ante shocks externos.
Pronósticos para el próximo año
El economista también ofreció su visión para 2026: espera una presión alcista del dólar, una inflación que podría superar el 100 % anual y la necesidad de que los inversores busquen alternativas fuera del mercado tradicional argentino. Recomienda diversificar inversiones en activos reales y bonos en monedas fuertes.
Conclusión
Para Miguel Kiguel, la regla de oro es clara: acumular reservas antes de buscar financiamiento externo. Solo así Argentina podrá romper la dependencia de EE.UU. y del FMI, y construir una base sólida para el crecimiento sostenible.