El Tigre sorprendió a su rival en Avellaneda al lograr una increíble remontada de tres goles en los últimos minutos, dejando a Racing sin puntos, y el equipo local reaccionó con la esperanza de recuperar lo que era de su derecho, pero terminó enfrentando la dolorosa frustración de perder el punto. El dirigente Gustavo Costas expresó su indignación con la frase Ladrón, ladrón tras el choque de emociones.