Durante la Asamblea General de la ONU el pasado 24 de septiembre, Javier Milei aprovechó la presencia del presidente Donald Trump para anunciar la firma de un swap de 20 bn USD que le permitirá financiar su campaña presidencial. La propuesta ha generado críticas de la oposición, que denuncia la llegada de fondos extranjeros y la creciente polarización política en Argentina. Con la economía en crisis, la medida sigue despiadada y controversial.
El 24 de septiembre de 2025, Javier Milei se entregó en la Asamblea General de la ONU para presentar su plan electoral y reforzar su presencia internacional. En medio de la sesión, Milei anunció la firma de un swap de 20 bn USD con el Departamento del Tesoro de EE UU, lo que le permitirá contar con recursos adicionales para su campaña presidencial.
El día anterior, el presidente Donald Trump publicó un tuit en el que expresaba su apoyo a Milei y al fuerte liderazgo argentino, lo que generó un debate global sobre la implicancia de la financiación extranjera en la política interna del país.
El cierre de las elecciones se proyecta para el 29 de octubre de 2025, fecha que marca el inicio de la campaña electoral. Milei ha reforzado su estrategia con un gran desembolso en Córdoba, donde la campaña está en marcha, y ha sido testigo de protestas de 12 k manifestantes en Rosario el 23 de agosto del mismo año.
La economía argentina sigue con un déficit fiscal que alcanza el 8,5 % del PIB, mientras la tasa base del Banco Central quedó en 44 % en agosto. El dólar oficial se cotiza en 1 335 ARS, apenas 10 puntos menos que su paralelito el 2 de septiembre, cuando la tasa blue fue de 1 345 ARS. La inflación mensual en febrero de 2025 se situó en 5,3 %.
La oposición acusa a Milei de contar con fondos que no provienen de la nación, y subraya la posible influencia que el swap puede tener sobre las decisiones económicas y políticas del mandatario. El movimiento de libertarismo que Milei defiende ha generado polarización, especialmente entre los sectores que dependen de subsidios y programas de bienestar.
Con la campaña en pleno desarrollo y los grandes desafíos macroeconómicos que enfrenta Argentina, la alianza con el presidente Trump y el financiamiento de 20 bn USD podría decidir el rumbo de la política nacional en 2025 y más allá. Los resultados de la elección y la respuesta del tejido social serán determinantes para el futuro del país.