La salud pública argentina enfrenta un repunte de casos confirmados de tos convulsa (coqueluche). Provincias como Santa Fe, Santa Cruz y La Plata han activado planes de refuerzo vaccinal y vigilancia epidemiológica para contener la propagación del contagio, que en años recientes ya cobró la vida de varios niños.
Situación actual
En las últimas semanas se ha registrado un notable incremento de casos confirmados de tos convulsa en varias regiones de la República Argentina. Las autoridades sanitarias de Santa Fe, Santa Cruz y la provincia de La Plata emitieron comunicados oficiales alertando sobre la necesidad de reforzar la vigilancia y acelerar la vacunación.
Medidas adoptadas por los gobiernos provinciales
- Santa Fe anunció la intensificación de la vigilancia epidemiológica y la ampliación de la campaña de vacunación contra la coqueluche, dirigidas a niños menores de cinco años y a grupos de riesgo.
- Santa Cruz confirmó dos casos nuevos y reiteró la importancia de completar los esquemas de vacunación con la dosis de refuerzo DTaP.
- La provincia de Buenos Aires (La Plata) emitió una alerta oficial declarando la aparición de casos en la región y solicitó a la población que se acerque a los centros de salud para recibir la vacuna.
¿Qué es la tos convulsa?
La tos convulsa, conocida internacionalmente como whooping cough o coqueluche, es una enfermedad respiratoria aguda causada por la bacteria Bordetella pertussis. Se caracteriza por accesos de tos profunda que pueden terminar con un sonido agudo al inhalar. En recién nacidos y niños pequeños la enfermedad puede ser grave, llegando a producir convulsiones, insuficiencia respiratoria y, en casos severos, la muerte.
Prevención mediante vacunación
El esquema vacunal recomendado por el Ministerio de Salud incluye la aplicación de la vacuna combinada DTaP (difteria, tétanos y pertussis) en tres dosis a los 2, 4 y 6 meses de edad, seguida de refuerzos a los 15‑18 meses y a los 4‑6 años. Un refuerzo adicional se indica para adolescentes y adultos, especialmente para quienes están en contacto estrecho con niños menores de un año.
Importancia de la detección temprana
Los síntomas iniciales pueden confundirse con un resfriado común, pero la aparición de tos persistente y los accesos de “gallo” deben motivar una consulta médica. Un diagnóstico precoz permite iniciar el tratamiento antibiótico, reducir la transmisión y evitar complicaciones graves.
Recomendaciones a la población
- Verifique el estado del esquema vacunal de sus hijos y solicite la dosis de refuerzo si corresponde.
- Acuda a los centros de salud ante cualquier tos persistente o accesos de tos intensos.
- Mantenga una buena higiene respiratoria: cubra la boca al toser y lave frecuentemente sus manos.
Las autoridades recalcan que la cooperación ciudadana es clave para controlar el brote y proteger a los más vulnerables.